Palabras que discriminan…

Aunque a veces no lo notemos, muchas de las palabras que utilizamos cotidianamente poseen un claro sesgo discriminatorio, pero su utilización se encuentra tan naturalizada que las repetimos de forma sin pensarlas, sin analizarlas, sin tener en cuenta sus efectos y como consecuencia incurriendo en una suerte de discriminación o xenofobia del lenguaje.